La espalda suele ser la gran olvidada de nuestro cuerpo. Quizá sea porque no la solemos ver, nos preocupamos por tener unas piernas bonitas, un abdomen plano, pero… ¿qué pasa con la espalda? Una espalda cuidada puede llegar a ser realmente sexy pero sobre todo nos puede ayudar a tener una calidad de vida mucho mejor.
¿Quién no ha tenido alguno vez un molesto dolor de espalda? Pues hoy vamos a hablar de cómo prevenirlos, y es más fácil de lo que piensas
Muchas veces ni siquiera somos conscientes de lo tensa que tenemos la espalda. Así que el primer paso es aprender a identificar las señales de alarma que nos avisan del estrés que podemos estar padeciendo y que acaba convirtiéndose en dolor de espalda.
Cómo acabar con el dolor de espalda producido por la tensión y el estrés
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Señales que nos avisan de una espalda tensa:
Entrecejo: Si estás tenso o estresado es más que probable que tengas arrugas en el entrecejo.
Hombros: ¿Vas todo el día con los hombros levantados? si la respuesta es afirmativa tienes otra señal de alerta.
Manos y Pies: Siempre tienes las manos y los pies fríos y no los puedes dejar quietos ni un momento.
Piernas: Las piernas es uno de los sitios donde más se nota el estrés. Puede que te den tirones a menudo o quizás las sientas tensas o inquietas.
Espalda: Independientemente de que estés sentado o de pie, sueles curvar excesivamente la zona lumbar o tensas mucho la espalda.
Rodillas: Es probable que notes las rodillas rígidas al caminar y que cuando estés de pie las tengas completamente extendidas.
Mandíbula: ¿Alguien te ha dicho últimamente que tienes cara de enfadado?. Cuando te estresas y te pones tenso, los músculos de la mandíbula se suelen tensar.
Pies: Es probable que cuando andas vayas con los talones levantados o que sólo apoyes en el suelo la punta de los pies.
Vale, ahora sabemos las señales que nos avisan de que estamos tensos, lo que seguramente acabe en dolores de espalda, pero… ¿Cómo podemos darle un pequeño respiro a la espalda?
Remedio de urgencia contra el estrés y los dolores de espalda:
Te voy a explicar una técnica muy sencilla que a mi me funciona cuando me siento estresada y la espalda me duele.
¡Quieto! cuando te notes muy tenso ¡para! Da igual lo que estés haciendo, es sólo un momento así que deja de hacer lo que estés haciendo aunque no sea tu tiempo de descanso.
Respira: inspira profundamente e intenta ir soltando la tensión poco a poco a la vez que vas expulsando el aire de los pulmones
Reflexiona: piensa en lo que estás haciendo y cómo lo estás haciendo, ¿es realmente necesario que hagas lo que estabas haciendo así?, ¿no lo puedes resolver de otra forma?, muchas veces cuando nos estresamos nos complicamos en exceso y nos pasan inadvertidas formas más sencillas de hacer las cosas.
Reacciona: seguro que hay algo que puedes cambiar, aunque simplemente sea la postura. Yo te recomiendo que hagas una pausa breve, por ejemplo te puedes levantar de la silla y dar un paseo cortito.
Te aseguro que con este pequeño ritual no solo te vas a librar de las dolorosas tensiones que se acumulan en la espalda, además te vas a sentir más alerta y vas a ser más resolutivo
Ejercicios para relajar la espalda en la oficina:
Cuello: Colócate bien erguido saca pecho, echa los hombros atrás y mete la barbilla. Inclina todo lo que puedas la cabeza al hombro derecho. Sujeta suavemente la cabeza con la mano. Aguanta esta posición unos 15 segundos y repite lo mismo con el lado izquierdo.
Brazos: Extiende los brazos en vertical por encima de la cabeza. Entrelaza los dedos y gira las palmas hacia arriba. Aguanta la posición 15 segundos.
Pecho: Ponte bien recto e inclínate hacia adelante solo un poco. Levanta los brazos a la altura de los hombros con las palmas hacia arriba y luego lleva los brazos hacia atrás sin mover el tronco. Mantén en esta posición 15 segundos.
Espalda: Hunde la barbilla contra el pecho. Entrelaza las palmas hacia afuera y extiende los brazos hacia adelante de forma que la espalda quede curvada. Esta postura la debe aguantar 15 segundos.
Cruza los brazos y coloca las manos sobre los hombros. Mira al frente y mueve la cabeza en línea recta hacia atrás. Tienes que estar así otros 15 segundos.
Hacer esta pequeña rutina te llevará menos de 2 minutos y te aseguro que puede obrar milagros en tus dolores de espalda
¿Y tú conoces alguna otra forma de librarte del dolor del espalda?
Fuente: este post proviene de Operación Bikini, donde puedes consultar el contenido original.
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