Las manzanas y el veneno tienen al parecer una estrecha relación desde hace mucho tiempo, y todo gracias a los hermanos Grimm que casi matan a la dulce Blanca Nieves con una manzana envenenada.
Las semillas de la manzana normalmente son evitadas por la mayoría de personas debido a su amargo sabor, aunque en ocasiones comemos una o dos por accidente. Muchos dicen que son sumamente saludables mientras que otros alegan que las semillas de la manzana son venenosas. ¿Quién tiene razón?
¿Las semillas de la manzana son venenosas?
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Las semillas de manzana contienen algo llamado la amígdala. Este se encuentra en la semilla de la manzana en cantidades relativamente altas. La cuestión es que este compuesto es inofensivo mientras la semilla está intacta, pero si por el contrario la semilla está rota por la masticación o por los ácidos gástricos, la amigdala se degrada en cianuro de hidrógeno compuesto que es altamente venenoso y puede ser letal en altas dosis.
¿Qué es el cianuro y cuanto puede tolerar el cuerpo?
El cianuro es un compuesto que se encuentra en ciertas cortezas, plantas y semillas como en este caso. El hombre descubrió su uso hace miles de años, este veneno interviene el suministro de oxígeno a la sangre y células, y en cantidad suficiente puede conducir a un paro cardio respiratorio y a la muerte en minutos.
No hay un cantidad mínima que podamos indicar para el cianuro pues todos los organismos son diferentes, lo que si podemos decir es que entre 0,05mg a 3,5mg por kilo de peso en la persona, puede causar intoxicación severa, paáalisis, coma, paro cardiaco o respiratorio e incluso la muerte.
Para un adulto promedio de unos 70 kilos, bastarán entre 40 y 260 mg de cianuro para llegar a causar la muerte, en menores cantidades dependiendo del peso puede causar náuseas, vómito, mareos, debilidad y confusión.
¿Tienen las semillas de la manzana el suficiente cianuro para hacerme daño?
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La cantidad de cianuro contenida en la amígdala de la semilla de manzana puede ser de hasta 1 mg, pero después de triturada o procesada la cantidad real que puede transmitir al organismo varia entre 0,06 – 0,24 mg. Lo que significa que para envenenarse gravemente un ser humano debe ingerir aproximadamente 2 tazas de semillas de manzana.
Hay que tener en cuenta que cantidades menores pueden hacer que una persona se enferme, dependiendo de su peso y de la tolerancia que pueda tener al compuesto. Para un adulto serían un aproximado de entre 300 y 6000 semillas, lo que es considerable teniendo en cuenta que una manzana contiene entre 10 y 20 semillas, lo que significa que tendría que comer entre 20 a 300 manzanas para caer enfermo.
Otro factor que convierte la semilla en inofensiva es que esta tiene un recubrimiento que evita que los jugos gástricos las desintegren por lo que podrían pasar sin mas por el sistema digestivo. De igual manera es conveniente retirar las semillas cuando damos manzana a nuestros niños o mascotas.
En conclusión las semillas de la manzana a pesar de contener uno de los venenos más poderosos de la naturaleza resultan inofensivas, a menos de que se coma una gran cantidad de éstas. Por eso si comiste un par de semillas por error, no te preocupes lo más probable es que nada te pase. Pero si te recomiendan cualquier receta o tratamiento que te incite a comer grandes cantidades de semillas de manzana, evítala y envía este articulo a quien te la recomendó.
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Traducido de: Authority Nutrition
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