Hoy nos toca hablar de las relaciones tóxicas. Creo que todo el mundo sabe muy bien lo que significan este tipo de relaciones, bien porque las haya sufrido en sus carnes, o bien porque le haya tocado de cerca con algún amigo íntimo o familiar. Cuando las vemos desde fuera, se nos hace difícil entender cómo alguien que la padece es capaz de soportarla. Es como una droga que sabes que es mala para ti, pero que no eres capaz de deshacerte de ella. Sin embargo, la cruda realidad es que la mayoría de las personas que están pasando por esta situación no son capaces de verla con claridad. Lo que sucede es que los que tienen problemas con las relaciones tóxicas se sienten familiarizadas con esa forma de vida.
Siguiendo con el hilo del párrafo anterior, existe un gran porcentaje de casos que aguantan relaciones tóxicas debido a que las han sufrido con anterioridad, ya sea en otra relación de pareja, o en su entorno familiar. Esto provoca que se tenga una sensación de normalidad en esos entornos hostiles.
Por todo ello, vamos a intentar citar algunas de las características que tienen estos tipos de relaciones para poder detectarlas mejor, y así actuar con prontitud.
Señales de las Relaciones Tóxicas:
Tienes la sensación de que te falta energía
Las relaciones tóxicas agotan, por lo tanto,
Bajada de autoestima
Una buena relación de pareja lo que hace es hacernos crecer como personas, nos hace ser más fuertes, nos incrementa la confianza en nosotros mismos en muchos aspectos, en definitiva, nos hacer ser mejores. Si notamos que nuestra autoestima esta bajando, que perdemos la confianza en nosotros y nos sentimos más inseguros, puede ser un indicio que estamos pasando por una relación tóxica.
La negatividad de tu pareja
Si tu compañero/a está quejándose continuamente y ve siempre las cosas negativas de lo que le pasa, tenemos que intentar tratarlo, ya que esa situación no es sana para ninguno de los dos. Tenemos que preguntarnos si eso es lo que queremos para el resto de nuestras vidas y si somos capaces de soportarlo. Esto no quiere decir que vayamos a salir corriendo y dejar a tu pareja tirada. Si realmente la queremos, tenemos que intentar ayudarla y tratar ese problema. Sin embargo, si esta persona no quiere ser tratada, lo mejor es dar un paso atrás y no enquistarse en esa situación demasiado tiempo.
Celos con familiares y amigos
Este es otro aspecto típico de las relaciones tóxicas. Tu pareja tiene que apoyarte en que mantengas el contacto con tus seres queridos. Diría incluso más, tiene que hacer que crezcan, tanto en cantidad como en calidad. Si lo que está haciendo es todo lo contrario e intenta alejarte de ellos, pidiéndote incluso explicaciones de por qué pasas tiempo con ellos, es un patrón negativo que hay que eliminar.
Control de tu tiempo y dinero
Bastante relacionado con lo anterior. Es muy importante que haya cierta independencia por parte de los dos, tanto económicamente, como incluso en la toma de ciertas decisiones (hasta cierto punto porque las que afecta a los dos hay que tomarlas juntos). Si lo que hacen contigo es justo lo contrario, debes plantar cara a esa situación y enseñar que hay un línea que no debe ser cruzada.
Un carácter impredecible
Si llegas a temer la reacción de tu pareja ante determinadas circunstancias porque no sabes cual va a ser, debes estar alerta y dialogar para revertir esa situación porque someterse a este tipo de personas puede afectarte muy negativamente en tu estado de ánimo, seguridad, confianza, etc.
Y eso es todo. Si crees que puedes estar pasando por una relación tóxica te invito a hacer este test de compatiblidad que te ayudará un poco más a determinar el estado de la relación.
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