En este caso, una nueva investigación del Hospital General de Massachusetts y la Universidad de Harvard (Estados Unidos) ha demostrado que los pacientes con cáncer colorrectal que tienen un consumo elevado de ácidos grasos Omega 3 tienen un menor riesgo de mortalidad de su enfermedad. Por lo que se establece que es bueno para ofrecer mejor supervivencia en el cáncer de colon.
Los ácidos grasos omega-3 poliinsaturados pueden llegar a bloquear el crecimiento tumoral y frenan el proceso de la angiogénesis, que precisamente hace que el tumor siga creciendo. Cuando en el estudio analizaron la dieta se dieron cuenta de que aquellos pacientes que presentaban un mayor consumo de ácidos grasos omega-3 procedentes del pescado estaban físicamente más activos, tenían mayor consumo de fibra y diferentes vitaminas. Y esto se unió a un menor consumo de tabaco y, como consecuencia, menor riesgo de cáncer colorrectal.
El estudio pone de manifiesto que la reducción de la mortalidad parece estar asociada con la cantidad de omega-3 consumida. Cuando más se tomaba menor era el riesgo, incluso aunque sólo se tuviera en cuenta la dieta después del diagnóstico.
De manera que aquellos pacientes que consumían al menos 0,3 gramos al día tras el diagnóstico tenían un riesgo un 41% menor de morir por esta enfermedad. La asociación entre la ingesta de ácidos grasos Omega 3 y una menor mortalidad era, además, evidente en aquellas personas que contaban con un índice de masa corporal (IMC) inferior a 25.
Está claro que necesitan de más estudios para probar la relación que hay entre el consumo de ácidos grasos y una mayor supervivencia, pero es un primer paso para identificar ambos aspectos, y es que las bondades de la Omega 3 son cada vez más numerosos y totalmente recomendadas por médicos para su ingesta diaria.
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