Sin embargo, no hay que comer con menos sabor si deseamos iniciar una vida más saludable al reducir el azúcar y la sal en nuestras comidas, podemos incluir hierbas y especias naturales que darán sabor y beneficios a nuestras preparaciones, entre ellas está el ajo.
Cualquier alimento al que se le añade ajo adquiere un sabor delicioso. Esto se debe a que este bulbo, es de uso permanente en casi todas las gastronomías; tiene la virtud de potenciar los sabores de todo tipo de platos, y queda muy bien con vegetales.
El ajo, familiar cercano de la cebolla, el cebollín y el ajo porro, pertenece a la familia de las liláceas y es de origen asiático, continente del que comenzó a emigrar haciéndose popular en Europa y luego en América.
Y bueno, el ajo no sólo es un potenciador natural de sabor, también aporta muchos beneficios al consumirlo con frecuencia:
Al comenzar a incluir menos sal y azúcar e incorporar potenciadores de sabor más naturales, podemos encontrar que los alimentos salados y azucarados no saben tan bien como lo hacían antes, ya que tu paladar comienza a acostumbrarse a los sabores naturales. Si no estás seguro si un alimento contiene azúcar o sal agregada, asegúrate de revisar los datos de nutrición y la lista de ingredientes.
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