No es que yo sea una experta en la felicidad, dar el avión y jamás me amargue, al contrario, creo que he desperdiciado demasiado tiempo amargándome y es por eso que quiero compartir contigo los 5 mandamientos y dejemos atrás la amargura y la negatividad.
1. Aprenderás a vivir contigo misma
Establece una relación contigo, he escuchado a muchas amigas decirme que no les gusta en lo absoluto la soledad, odian sentirse solas, sufren cuando llegan a su casa y terminan huyendo porque se sintieron solas por un segundo. Obviamente está increíble socializar, pero también tienes que saber convivir contigo, no tener miedo a escuchar tus pensamientos y descubrir qué es lo que disfrutas del tiempo contigo.
A veces cuando nos enfrentamos a la soledad es horrible porque justamente es el momento en que nos atormentan temas como: ¿Por qué no tengo novio? ¿Qué nunca encontraré al amor de mi vida? ¿Moriré sola? o simplemente te sientes medio loser porque en ese momento crees que no tienes amigos, no tienes planes divertidos, etc.
2. Dejarás de ser Negativa
Está super cañón cuando empezamos a ser negativas y todo verlo en color negro. Te invitan a un viaje de fin de semana y tu respuesta es: Está super caro, además son mil horas de camino, quizás llueva, va fulanita que me cae mal o yo le caigo mal.
La verdad es que creo que a veces somos negativas simplemente porque necesitamos seguir alimentando excusas para seguir sintiéndonos la víctima de la situación. Poner pretextos de todo, criticar o juzgar todo, victimizarte, etc. no te ayudarán a sentirte más feliz.
3. No pasarás horas en redes sociales
Últimamente me he dado cuenta que las redes sociales pueden ser nuestro peor enemigo. Cada vez se nos está haciendo mas difícil diferenciar entre lo real y lo virtual, entre lo que nos importa y lo que les importa a los demás. Pasar horas y horas diarias en las historias de instagram no te van a acercar a tus metas o a tus sueños, al contrario, te están quitando tiempo de tu vida. Yo sé que es muy padre compartir cosas por redes sociales e inspirarnos viendo a personas como nosotras haciendo o hablando de temas que nos gustan, pero hay una delgada línea entre inspirarnos y desear la vida de alguien más.
Siempre lo digo, perdón, pero jamás te compares con alguien que ves en redes sociales, eres diferente, tu tienes otras cosas que la otra persona no y tienes que saber que tu vida es única.
4. No todo es blanco y negro
Esté punto creo que es más para mí que para cualquiera. Soy la persona más extremista y dramática del mundo. Para mí ha sido muy difícil darme cuenta de que no existen verdades o mentiras absolutas, que en el mundo hay una escala de grises y que no todo es sí o no. Quizás tu mente trabajé como la mía y de repente piensas que si alguien te dice que no es porque esa persona no te quiere, no le importa, etc. pero la realidad es que hay muchas razones y motivos por los que alguien más te puede decir que no.
Me considero una persona con carácter fuerte, suelo ser de las que da su opinión sin miedo, tengo super establecidas mis prioridades y eso está muy bien, me hacen ser una mujer fuerte, que sabe lo que quiere pero a veces todo eso también puede jugar en mi contra, muchas veces soy intolerante, otras tantas soy totalitaria y no siempre está bien querer definir la vida o las acciones en dos extremos, bueno o malo.
5. No podrás controlar todo
Ni modo, acéptalo, no puedes controlar todo. La verdad es que no puedes amargarte simplemente porque las cosas no salen como tu querías. A veces es mucho más importante disfrutar el proceso que un resultado, has las cosas porque las quieres hacer, porque las disfrutas, porque quieres lograr algo, pero si ese resultado no llega no te frustres.
Como dice la frase de las abuelas: Uno pone y Dios dispone.
Da tu máximo pero si las cosas no salen como esperabas no pasa nada, piensa que tienes otras oportunidades para que las cosas salgan como tú quieres.
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