Continuando con el tema anterior que corresponde a la fase nº uno que trata sobre la respuesta inicial también podemos añadir que tampoco es muy bueno tomar los extraordinarios y sanos Omegas después del entrenamiento, ya que los omegas están asociados también a ciertos efectos anti- inflamatorios naturales que del mismo modo terminan inhibiendo el ácido arachidonico así como también las prostaglandinas, dichos ácidos grasos esenciales deberían consumirse en otras horas del día pero nunca luego de un entrenamiento, si la meta es un poder lograr el máximo efecto anabólico posterior a un entrenamiento.
Otro motivo para no tomarlos luego del entrenamiento, radica en el hecho de que al ser grasas, llegan a hacer la digestión un tanto más lenta y eso es sí, no es para nada prudente en esta fase, ya que necesitas llevar nutrientes a tus músculos lo más rápido que puedas, antes de que llegue el momento en que se cierre la ventana anabólica. Dicho esto, hemos podido expresarte las dos razones principales por las cuales los omegas, específicamente el omega3 no debería de ser consumido en el pre y post entrenamiento de los fisiculturistas profesionales.
Retornamos al punto en que las prostaglandinas ensanchan la producción de óxido nítrico al nivel celular dentro de los músculos, el cual es otra molécula que resulta bien activa en los procesos anabólicos. Su acción fundamental es dilatar o ensanchar las venas y las arterias para acrecentar la circulación de los nutrientes y las hormonas hacia los músculos y también aumentar la producción del factor de crecimiento Hepatocito para la debida activación de las células satélites.
El Ac arachidonico contribuye del mismo modo al dolor y la inflamación que sobreviene en el musculo cuando se está entrenando de una forma intensa y asimismo es responsable en cierta forma del dolor de los músculos que queda para el siguiente día de haber ejercitado el musculo. La cantidad de ácido arachidonico que es almacenado así como también la intensidad del entrenamiento de los musculos, será lo que va a determinar los buenos resultados a obtener de ciertos entrenamientos especificos, a nivel bioquímico y endocrino.
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El Ácido Arachidonico En El Cuerpo.
La cantidad de ácido arachidonico acumulado en los músculos, lo establece diferentes factores, entre ellos la nutrición y la frecuencia con la que uses este lípido en tu organismo en el constante entrenamiento. El entrenar con pesas continuamente reduce de una forma considerable las reservas del ácido arachidonico en los músculos y con una menor cantidad de ácido arachidonico, habrá una menor producción de prostaglandinas y una menor respuesta a los entrenamientos la cual es otra de las razones por la que es preciso descansar un poco de las pesas y no entrenar a diario.
Alguna vez te has preguntado ¿por qué en el comienzo de los entrenamientos (el comienzo del hábito de entrenar) te sentías tan brutalmente adolorido o cuando te tomabas un largo descanso del entrenamiento? Absolutamente todo esto está estrechamente relacionado con el ácido arachidonico y con la cantidad del mismo que tengas almacenado, mientras más ácido arachidonico tengas, entonces será más fácil ser liberado en los músculos cuando entrenes y viceversa. Por suerte, estos niveles pueden ser aumentados con la aplicación de una dieta y con la suplementación inteligente.
El Esquema Bioquímico Seria El Siguiente Más O Menos.
Ocurre un daño muscular que se enfoca en el momento negativo de los ejercicios.
Se activa la fosfolipasa que catabólica las capas exteriores de las células que están hechas de fosfolípidos.
Se produce el Ácido arachidonico.
El fosfolípido principal anabólico del cuerpo permite la formación de las prostaglandinas y de otros productos activos que son derivados del ácido arachidonico.
Fase Nº Dos: La Sensibilidad Localizada En Los Tejidos.
Esta fase Nº dos se caracteriza principalmente por un incremento localizado de los factores de crecimiento y de una gran sensibilidad ante las hormonas anabólicas. Para las personas que siempre se han cuestionado el por qué las hormonas anabólicas en realidad no funcionan sin aplicar algún tipo de entrenamiento, les daremos una simple explicación en seguida:
Tratando de explicar de la forma más simple, el musculo tiene que ser preparado y sensibilizado para poder recibir, asimilar y procesar dichas hormonas. Una de las maneras en los que el organismo hace esto, es incrementado el tamaño de los receptores de las células (en las fibras musculares) que requieren iniciar la reparación. Esto incluye los andrógenos, IGF-1, MGF y los receptores de la insulina, etc.
Provocarle un daño al musculo con el entrenamiento (en la fase Nº uno) es lo que inicia verdaderamente la fase Nº Dos y la posibilidad que tiene el musculo de procesar tales hormonas, este proceso es bastante importante dentro del cuerpo humano, debido a que así se evitaría que se estimule el desarrollo de los tejidos en el cuerpo en los sitios donde no se requiera. Los receptores como tal, son los que establecerán la potencia de un químico o de una hormona farmacéutica, la cantidad y su tamaño.
Para hacerlo un poco más claro, se necesita saber o mejor dicho recordar que existen dos mecanismos separados que pueden interactuar, antes de que cualquier recado pueda ser enviado hacia las células de los músculos permitiendo que ocurra el debido crecimiento. Por un lado se tiene una hormona o un factor de crecimiento, como es el caso de la testosterona, IGF-1, MGF o de la insulina y por otro lado se tienen todos sus receptores correspondientes.
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¿Qué Sucede Con Las Inyecciones De Hormonas Y Factores De Crecimientos Anabólicos Exógenos?
Inyectarse algunas hormonas y/ o algunos factores de crecimiento anabólicos exógenos, pueden facilitar en gran medida que se tengan más receptores y aún más mensajes puedan ser llevados a las células de los músculos para hacerlas crecer, en realidad este efecto es bastante obvio, ya que mientras más hormonas o mientras más factores de crecimiento poseas alrededor de estas células, entonces las uniones entre hormonas serán mayores, los factores de crecimiento y sus debidos receptores se darán y el mensaje debido de hacer crecer dichas células entonces será mayor y más intenso.
También se debe saber que el tener una mayor cantidad de receptores en lugar de tener más hormonas, igualmente facilita un mayor desarrollo muscular. Más receptores representan que las hormonas y los factores de crecimiento ya existentes en tu cuerpo, podrán encontrar más fácil sus receptores para unírseles y enviar sus mensajes para hacer crecer los músculos.
El hecho de unirse más rápido a un receptor, representa que el proceso anabólico también será más rápido y esto dará chance que ese mismo mensaje, pueda repetirse con una mayor velocidad en otros receptores, antes que sean destruidas las hormonas y los factores de crecimiento por ciertas enzimas en los músculos. En resumen, todo esto se trata de la cantidad de mensajes y con qué celeridad puedan ser enviados tales mensajes, en un periodo determinado de tiempo.
Es justo aquí, en la fase Nº dos donde nos encontramos con un incremento bastante significativo en la sensibilización de las células de los músculos hacia las hormonas y los factores de crecimientos anabólicos, que resulta de la misma manera vital para el desarrollo muscular. Dicha sensibilidad se puede enfocar en los IGF-1, IL-1, IL-6, MGF, FGF, TNF y HGF.
Todos estos compuestos ya mencionados, serán liberados y trabajaran juntos todos en las fibras de los músculos dañados y en las células satélites, como si se tratara de una gran sinfonía en la que cada músico interpreta su parte y es igual de significativo que el otro. Sin embargo, en este caso en particular, la acción de uno de estos, debe ser seguida de inmediato por la acción del otro y así sucesivamente, potenciándose y mejorándose entre sí.
El Siguiente Sera El Debido Orden:
El Daño en las fibras musculares.
Metabolismo del ácido arachidonico.
La sensibilidad hacia los andrógenos.
La sensibilidad hacia el IGF-1.
La sensibilidad hacia el MGF.
La sensibilidad hacia la Insulina.
Se aumenta la presencia del IGF-1 en las células.
Se aumenta la presencia del IL-1, IL-6, TNF.
Se aumenta la presencia del FGF.
Se aumenta la presencia del HG
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Para leer el articulo completo ir a: Bioquímica De La Hipertrofia Asociada A La Endocrinología (PARTE II)
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Fuente: este post proviene de JAVIER CHIRINOS, donde puedes consultar el contenido original.
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