Siempre hemos oído que el café es malo para la salud, pues la culpa de esa mala fama la tiene el tueste con azúcar (torrefacto) que se utiliza para caramelizar y cubrir el grano. Tiene su origen en la posguerra cuando no había suficiente materia prima y se optaba por mezclarlo con azúcar, obteniendo un producto final con menos café, esto lo hace más oscuro y de sabor fuerte, por lo que el café natural puede parecer flojo por estar acostumbrados al sabor que obtenemos del torrefacto.
Estudios han demostrado que el café torrefacto tiene propiedades cancerígenas como otros alimentos tostados y nada de nutrientes, tampoco esta recomendado para diabéticos ni para personas con problemas estomacales. El café torrefacto enmascara el sabor del café natural y lo hace poco saludable.
Entonces siempre opta por café de tueste natural que además de reconfortar y dar energía nos aporta múltiples beneficios:
- Importante concentración de antioxidantes.
- Alivia el dolor de cabeza y algunos tipos de migrañas.
- Ayuda a reducir la aparición de cálculos biliares y problemas de vesícula.
- Evita el estreñimiento.
- Es diurético.
- Nos da energía y sensación de bienestar.
- Ayuda ante la depresión.
- Reduce el riesgo de padecer parkinson y cáncer de colon.
Por estas y otras muchas razones disfruta de tu reconfortarte y aromática taza de café.
"El café, néctar de dioses, ha de ser, para ser bueno, ardiente como tus ojos, negro como tus cabellos, tan puro como tu alma, tan dulce como tus besos."
Francisco Villaespesa
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