Hay muchos alimentos que por la combinación de los compuestos que los forman y sus propiedades naturales, refuerzan el sistema inmune e incluso atacan enfermedades específicas. Lo mejor es que se trata de alimentos que tenemos siempre en nuestro hogar, debido a que son utilizados comúnmente para realizar nuestra comida.
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Uno de los más potentes y poderosos de estos, es el ajo, el cual contiene más de 60 componentes antivirales y antibacterianos, que no solo curan, sino que previenen todo tipo de infecciones, de dos maneras, aplicado directamente sobre heridas o ingerido que te librará como por arte de magia de cualquier molestia.
La cebolla, por su parte, es uno de los antibióticos naturales más importantes, ya que por la combinación de sustancias que la conforman es excelente para cualquier infección de las vías respiratorias, también sirve para combatir todo tipo de parásitos intestinales.
El jengibre, tiene un papel antibiótico selectivo, siendo implacable con los microorganismos malignos y fomenta el crecimiento de microorganismos benignos como la flora intestinal, además es particularmente bueno con infecciones intestinales y de garganta.
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De la misma manera, el romero forma parte de estos antibióticos, tiene más de 20 propiedades antivirales, el té de romero por ejemplo, es excelente para evitar que gérmenes, que potencialmente pueden dañar tu salud, se expandan en el cuerpo causando un problema mayor. Tres veces a la semana tomar una infusión, te ayudará a prevenir infecciones y enfermedades.
Ayudarte con el consumo de estos alimentos, será una buena decisión, ya que puedes atacar de manera natural ciertas enfermedades, comienza a integrarlos de esta forma a tu vida, logrando proteger tu organismo.
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