En el caso de los trabajos de cara al público surge la dificultad de intentar que ese malestar interno no se note en el trato hacia el cliente. O también, en caso de realizar el teletrabajo puedes sentirte totalmente quemado de una rutina tan solitaria. Aquellos profesionales que viajan con frecuencia por motivos de trabajo pueden experimentar el peso del desarraiago. En definitiva, son muchas las causas del cansancio psicológico.
Cómo curar el cansancio psicológico
1. Asumiendo que no hay nada más importante que tú. Y esto puede implicar tomar decisiones. Por ejemplo, si eres autónomo, tal vez puedas bajar la carga de trabajo al renunciar a algunos encargos. Si trabajas por cuenta ajena, intenta tomarte unos días de vacaciones. O tal vez, contratar los servicios de un profesional por horas que te ayude con la realización de algunas tareas de la casa.
2. Intenta pasar menos tiempo frente a la tecnología. Vivimos en una sociedad en la que resulta realmente difícil desconectar. Sin embargo, si puedes marcharte un fin de semana a una casa rural, sin ordenador y sin conexión wifi, notarás grandes beneficios de bienestar si también apagas el móvil.
3. Busca la comodidad de pasar más tiempo tumbado en el sofá o encima de la cama. Todos hemos pasado por momentos en los que el cuerpo nos pide calma.
4. Si tienes hijos, no asumas como una responsabilidad propia la realización de los deberes escolares. Es importante que tu hijo se haga cargo de sus responsabilidades de un modo autónomo.
5. A veces, tenemos que priorizar. Por ejemplo, si estás trabajando y estudiando al mismo tiempo, tal vez tengas que tomar alguna decisión al respecto, si este doble objetivo te agota mentalmente. No podemos llegar a todo, y tenemos que asumirlo. Especialmente, cuando el cuerpo y la mente nos pone en situación de tener que hacer cambios porque estamos agotados.
El cansancio psicológico afecta a tu salud. Pero el mejor modo de luchar contra él es la prevención.
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