Si bien es cierto, los cereales forman parte importante de nuestras dietas ya que se puede encontrar en cada uno de nuestros platos como en el pan, la pasta, ojuelos de cereales y más. Una vez observado esto, podemos comenzar explicando que la intolerancia al gluten es una enfermedad que está relacionada a una hipersensibilidad a las proteínas que se encuentran en este, y que se presenta en el sistema digestivo deteriorando la vellosidad que recubre al intestino delgado.
Las personas que sufren de este trastorno autoinmune pueden experimentar una reacción inmediata al consumir gluten que afecta al intestino y hace que el cuerpo no pueda ingerir sus nutrientes creando un fuerte dolor estomacal. Aunque la posibilidad de ser intolerante al gluten es tan bajo que puede ser de 1 entre 100 personas, debes tener mucho cuidado al ingerirlo y estar pendiente en caso de presentarse alguno de los siguientes síntomas.
Algunos síntomas a los cuales debes prestar mucha atención para saber si sufres de intolerancia al gluten son:
Reacciones cutáneas: Es más común de lo que parece el poder observar una reacción alérgica en la piel o problemas de acné al ingerir alimentos con gluten debido a que el cuerpo no puede absorber sus nutrientes. Esto puede irritar la piel provocando ardor y picazón.
Rápido aumento de peso: Esta enfermedad puede hacer que aumentes de peso repentinamente debido a que tu intestino no trabajara correctamente, razón por la cual el cuerpo trabaja más de lo normal para tratar de ingerir los nutrientes en los alimentos provocando gases, hinchazón y al mismo tiempo un aumento de peso.
La aparición de dolores de cabeza: Se ha logrado observar en una gran variedad de pacientes que sufren de este problema, que aproximadamente una media hora después de ingerir alimentos con gluten tienden a sufrir fuertes dolores de cabeza, aun que no se presenta en el 100% de los casos.
Dolores en las articulaciones y músculos: Aunque la aparición de este tipo de dolores no es instantánea puede aparecer algunas horas posteriores a la ingesta de gluten debido a que este puede provocar hinchazón y fuerte dolor en las articulaciones y los músculos de los pacientes.
Ulceras bucales: Este problema puede hacer aparecer ulceras tanto en la cavidad bucal como en el tracto digestivo y al mismo tiempo disminuir los niveles de calcio de la persona. Por su parte, sabemos que un bajo nivel de calcio puede afectar a nuestros huesos y por lo tanto a nuestros dientes.
Fatiga: Se ha logrado observar que en una amplia variedad de pacientes que manejan este problema, el ingerir alimentos ricos en gluten puede provocarles un estado de fatiga, náuseas o agotamiento al poco tiempo.
Función inmune anormal: El gluten puede crear una confusión en el trabajo de los anticuerpos al ser ingerido, provocando a su vez que estos trabajen de forma inadecuada dejando el organismo expuesto a contagiarse de una diversidad de enfermedades.
Calambres abdominales: Este es uno de los síntomas más comunes entre los pacientes que padecen de esta enfermedad puesto a que su intestino no trabaja correctamente y esto provoca un estreñimiento.
Si detectas alguno de estos síntomas al ingerir alimentos con gluten, te recomendamos que visites a un especialista en el área para que conozcas como debe ser tu dieta alimenticia en caso de padecer de esta enfermedad, para así hacer de tu vida más placentera.
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